SEAMOS
CONSCIENTES
En ocasiones
se observa, cuando llega el período de
lluvias, muchas personas quejarse de los estragos que hacen éstas en los
vecindarios, ciudades, pueblos. Pero es que la lluvia es necesaria, es una
bendición de Dios, hace crecer las plantas, nos da agua para consumo, mantiene
lleno los manantiales, conserva el ciclo del agua. Ahora, la lluvia se convierte en un fenómeno “peligroso”
cuando el mismo ser humano ha quitado los causes de los ríos construyendo casas en estos. Cuando lanzamos toda la basura
en los sitios que no corresponde. Cuando hacen grandes centros comerciales
cerca de ríos y le han restado espacio para que el rio corra tranquilamente.
Cuando se construye en zonas donde el suelo no es apto. Al final la naturaleza
no tiene la culpa de nada, somos nosotros los seres humanos que no respetamos en muchas ocasiones a la naturaleza.
“Porque la
tierra que bebe la lluvia que muchas veces cae sobre ella, y produce hierba
provechosa a aquellos por los cuales es labrada, recibe bendición de Dios”. Hebreos 6:7
Seamos conscientes.
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